DEPARTAMENTO DE BOUAKÉ, Côte d’Ivoire – Thérèse Kouadio, de 18 años, es la mayor de cinco hermanos en el distrito de N’Gattakro, en el departamento central de Bouaké de Côte d’Ivoire.
Fue criada por su abuela y dejó la escuela con solo 14 años para tomar un trabajo de limpieza en Abiyán, la capital, para ayudar a pagar las cuentas familiares, pero antes de cumplir 18 años ya había tenido dos embarazos tempranos muy cercanos entre sí.
“Di a luz a mis dos hijos por cesárea en el Hospital Universitario de Bouaké”, aclaró al UNFPA, la agencia de las Naciones Unidas que se encarga de cuestiones de salud sexual y reproductiva.
“La primera fue en 2023, una niña que ahora tiene más de un año, y luego un niño en octubre de 2024. Después de dar a luz a la primera, quería usar anticonceptivos, pero no lograrme decidirme. Cuando fui a ver a la comadrona, me dijo que esperara hasta que me llegara el período”.
La planificación familiar puede ayudar a las mujeres a espaciar sus embarazos y evitar quedar embarazadas si no tienen intención de hacerlo, especialmente cuando aún son menores de edad.
“Sin embargo, no me llegó el período”, continuó la Sra. Kouadio. “Más bien noté que algo se movía en mi vientre; fue cuando fui al hospital y descubrí que estaba embarazada de seis meses”.
Adaptar la educación sexual a las necesidades reales
Advertida por su médico sobre los peligros de embarazos tempranos y poco espaciados, la Sra. Kouadio buscó una solución anticonceptiva. Descubrió que el Servicio de Salud Escolar y Universitario para Adolescentes y Jóvenes, conocido comúnmente como el servicio de salud escolar, ofrecía una gama de opciones gratuitas adaptadas a las necesidades de las y los jóvenes, independientemente de si están o no asistiendo a la escuela.
“No me llegó el período. Más bien noté que algo se movía en mi vientre”.
“Había oído hablar de la clínica, pero nunca había estado allí. Fue una mujer local que me aconsejó ir a la clínica escolar para buscar métodos anticonceptivos y dijo que era gratis. No quiero que me sorprenda otro embarazo, así que rápidamente llegué para procurar el implante”.
El UNFPA apoya la iniciativa de servicios de salud escolar para aumentar el acceso de las y los jóvenes y adolescentes a la atención de la salud sexual y reproductiva. El centro que visitó la Sra. Kouadio es uno de los 98 centros de servicios de salud escolares y 135 enfermerías de secundaria que forman parte del programa. Juntos ofrecen programas de promoción y prevención, asesoramiento e intercambios de ideas en espacios seguros y clubes juveniles, y una aplicación con información y asesoramiento sobre salud sexual y reproductiva.
También se realizan reconocimientos médicos periódicos y planificación familiar gratuita, además de consultas, atención médica a las madres jóvenes y apoyo a personas que viven con el VIH/SIDA.
Estos servicios también se prestan en centros de salud fijos y a través de consultas móviles: esfuerzos para llegar a las y los jóvenes donde se encuentren. Esto es importante porque las encuestas muestran que las niñas a menudo no saben dónde ni cómo llegar a los servicios de salud destinados a ellas. Según los últimos datos, casi una cuarta parte de las adolescentes de Côte d’Ivoire quedan embarazadas antes de cumplir los 19 años, con tasas dos veces más altas en las zonas rurales que en las urbanas.
Los embarazos precoces y no planificados son apenas una consecuencia de la falta de información y atención en materia de salud sexual y reproductiva. Entre las otras consecuencias se cuentan los abortos peligrosos y las enfermedades de transmisión sexual, que pueden causar problemas de salud duraderos o incluso la muerte.
Tratar a las y los jóvenes con respeto y dignidad
“Nuestra misión es proporcionar una acogida sin prejuicios, y soluciones para ayudar a las y los jóvenes a recuperar su confianza en sí mismos”, explicó la Dra. Aoura, directora médica adjunta del servicio de salud escolar en el distrito comercial de Bouaké.
Ese fue el tipo de atención que recibió la Sra. Kouadio: fue recibida por la comadrona Sylvie Yébouet, quien le explicó las diferentes opciones anticonceptivas disponibles. Después de que se decidiera por un implante anticonceptivo de acción prolongada, la Sra. Yébouet le insertó el dispositivo en el brazo.
“Es diferente de los hospitales a los que fui cuando estaba embarazada. Aquí la partera era amable, no me habló mal, no me gritó, me dio consejos y me cuidó bien”, agregó la Sra. Kouadio, señalando que recomendaría el centro de salud a otras jóvenes.
Para que las mujeres y las niñas alcancen el punto de toma de decisiones informadas en materia de salud reproductiva se requiere un fácil acceso a servicios de salud reproductiva de alta calidad, incluidos métodos anticonceptivos apropiados y asequibles.
Desafortunadamente, se estima que alrededor de 257 millones de mujeres en todo el mundo quieren evitar el embarazo, pero no utilizan métodos de planificación familiar seguros y eficaces, ya sea por falta de acceso a la información y los servicios o por la resistencia de sus parejas y comunidades.
El UNFPA colabora estrechamente con el Gobierno de Côte d’Ivoire para garantizar que las y los adolescentes y otros jóvenes puedan recibir los servicios de apoyo que necesitan para desarrollar su potencial. La Sra. Kouadio, por un lado, ha podido realizar distintos trabajos que le permiten ganar lo suficiente como para cubrir los gastos asociados con sus clases nocturnas, y trabaja con el objetivo de convertirse en asistente de cuidado.